Recomendación: ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?

Ya que hace unas semanas tuve la ocasión de ver la Director's Cut de un clásico de la ciencia ficción como Blade Runner, mítica película de los 80 dirigida por Ridley Scott, he creído conveniente hablaros de la novela en que se basa, escrita por uno de los autores de ciencia ficción más conocidos (tanto por su faceta de escritor, como por su vida personal). Se trata de ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, de Philip K. Dick.

Portada de la edición actual de Edhasa, con el póster de la película Blade Runner

Debo remarcar que hace unos años que leí esta novela, por lo que no recuerdo por completo todos los detalles. Sin embargo, puede ser interesante ver qué es lo que se me quedó del libro para que vaya a recomendarlo ahora.

Cuando me hice con ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, anteriormente había leído Ubik, una de las novelas más extrañas e inolvidables de las que he tenido ocasión de disfrutar, por lo que las comparaciones van a ser inevitables.

Desde luego, es una lectura interesante que, como la anteriormente mencionada, consigue liar y hacer dudar de muchas cosas respecto a la trama, y finalmente conseguir que todo cobre sentido. También tiene partes emotivas que hacen plantearse cosas como... ¿una máquina dotada de inteligencia tiene derecho a... "vivir"?

Así que os propongo que os embarquéis, junto al cazador de bonificaciones Rick Deckard, en una aventura para ir a la caza de 6 peligrosos androides venidos de Marte que ya han dejado fuera de combate a uno de sus compañeros. Y todo en una ambietación post-apocalíptica, con una Tierra radiactiva y polvorienta con muchísimas especies animales extinguidas y sustitutos robóticos, diferentes estatus sociales para los que se quedaron en el planeta madre (ya sea porque no pudieron o no quisieron mudarse a Marte) y una curiosa especie de religión (que no en su día no llegué a entender del todo, debería hacer una revisión, ahora que ha pasado un buen tiempo).

Sinceramente, me gustó bastante, pero el final me decepcionó un poco. Pasó de previsibilidad a sorpresa, pero después me quedé con ganas de más, porque el desenlace no me dejó del todo satisfecho... aunque claro, siendo el señor Dick, tampoco me puedo quejar. ¡Su estilo es tan personal que tal vez no supe apreciarlo aquella vez!

¡Saludos! ;)