Guillem López.
Escritor de Castellón. Su novela La guerra por el norte fue publicada en la colección Excálibur Fantástica, de la editorial Grupo AJEC. Durante 2010 fue la novela más vendida en dicha editorial, situándose entre las cincuenta novelas más vendidas en la sección de Literatura Fantástica de FNAC. Su segunda novela, Dueños del destino, saldrá publicada a finales de Octubre de 2011. También ha publicado relatos en las antologías Descubriendo nuevos mundos, Crónicas de la Marca Vol.II e Ilusionaria. Además de escribir diseña los mapas de sus historias y compone la música inspirada en ellas. Co-fundador de Bochinche Teatro y colaborador de Teamotro. Ha compuesto la música para diversas performance y lecturas de poesía además de la banda sonora de su novela, La guerra por el norte, de corte épico-fantástico.
(Extraído de su perfil de blogger)
Entrevista:
¿Quién
es Guillem López?
No
lo sé. Si alguien lo descubre que me envíe un mensaje y me lo diga, pero
después tendré que matarlo.
¿Qué
te impulsa a escribir?
No
sé hacer otra cosa. Bueno, eso no es cierto, sé hacer muchas cosas pero
escribir es la única que se me da realmente bien. Si no escribiese me sentiría
como un miserable.
¿Podrías
mencionarnos qué libros son los que más te han marcado en tu vida?
La
Biblia.
¿Algún
escritor por el que sientas debilidad?
Soy
un iconoclasta además de un caprichoso. Tan pronto encumbro a un autor como lo
derrumbo y sustituyo con otro. Eso me deja como un libertino literario, un
promiscuo; qué le vamos ha hacer.
Como
escritor, ¿siempre has sido de literatura fantástica o antes bailaste al son de
otros géneros?
La
guerra por el norte era mi primera novela fantástica. Hubo un tiempo en que
intentaba escribir novelas realistas; lo intentaba y fracasaba. Hasta que
descubrí que me negaba a mí mismo aquello que realmente deseaba, regresar a los
orígenes y ampliar las fronteras literarias. Francamente, a estas alturas ya no
puedo abandonar el hecho fantástico, se ha convertido en un elemento más de lo
que escribo.
¿Qué
cosas te suelen inspirar o en qué momentos sueles encontrar mayor lucidez
creativa?
Cualquier
cosa puede inspirarte. Mi próxima novela la concebí tras pasar veinte minutos
observando el caótico vuelo de una docena de moscas en la terraza de mi casa.
Lo importante es asociar las ideas y retenerlas hasta convertirlas en
fragmentos, relatos o incluso novelas.
¿Pluma
o teclado? ¿Algún ritual a la hora de escribir?
Escribo
siempre en mi fiel ordenador portátil. Soy muy buen mecanógrafo y eso facilita
las cosas. Sin embargo, a la hora de trabajar las ideas y el guión de una nueva
historia lo mejor es regresar a la eterna libreta y sus garabatos.
Te
propongo un reto, hazme una pequeña descripción de un personaje basado en ti si
aparecieras en uno de tus libros.
—Haré
algo mejor que eso —dice el escritor.
—¿Algo
mejor? —duda el entrevistador y arruga una sonrisa.
—Te
daré una escena completa.
—¿La
escena de una novela?
—Puede.
¿Ves ese botón rojo?
El
entrevistador desvía la vista de la pantalla y observa el recién aparecido
botón rojo sobre la mesa.
—Eso…
eso no estaba ahí.
—Bueno,
¿y a quién le importa? Sólo tienes que pulsarlo.
—Pero…
¿cómo lo has hecho?
—Tú,
pulsa el botón rojo. Te gustará.
—No…
no estoy seguro —titubeó—. ¿Es un truco?
—¿Y
qué no lo es? La vida entera es un truco. Unas veces somos el mago, otras el
conejo blanco que sale de la chistera.
—Y
yo soy el conejo…
—Eso
nunca se sabe. ¿Quién es quien? ¿Mago o conejo? Sólo tienes que pulsar el botón
para averiguarlo. Vamos, hazlo.
El
entrevistador desliza los dedos sobre el botón, despacio, casi acariciando su
indecisión. Hay un instante frágil, amenazante, como el hielo quebradizo bajo
los pies. El boton espera en silencio, espera y crece, espera. ¿Qué espera?
¿Qué hay tras la plástica y sanguinea cobertura de un mecanismo imposible?
Quizá es la puerta a otro lugar, a otro tiempo. Tal vez sea el tobogán a un
lugar sin nombre, al espejo que no refleja ningún rostro, el espejismo que
vuelve las fantasías reales, las pesadillas cotidianos actos ensayados. Sólo el
escritor lo sabe, aunque no lo dice.
—Click
—anuncia el botón con sádica ironía.
¿Cómo
fue el proceso de producción de la primera novela?
Todo
fue muy bien. Me llevó unos meses prepararla y unos seis escribirla. Dedicación
absoluta, eso sí.
¿Qué
sentiste al verla publicada?
Una
gran alegría. Había pasado por muchos rechazos y golpes a traición. Me sentí
como el náufrago que toca tierra tras una noche a la deriva: salvado. Sin
embargo, luego descubres que queda lo más duro, sobrevivir y seguir adelante.
Nadie regala nada y tienes que trabajar mucho para avanzar y mejorar con cada
libro.
¿Alguna
preferencia entre las publicadas?
Soy
un tío muy estricto con lo propio, así que siempre elijo mi último trabajo y
reniego de los anteriores. De momento Dueños del destino, aunque advierto que
mi próxima novela no dejará a nadie indiferente.
¿Cómo
se te ocurrió la trama de “Leyendas de una era”? ¿Cómo nació esta saga?
Nació
en torno a una mesa con seis chavales jugando a rol. Unos amigos decidimos
crear un mundo propio en que establecer nuestras partidas. Así nació Kanja. Yo
sólo tomé aquella base y la desarrollé durante años. El mismo inquisidor Anair
era uno de mis personajes en aquellas partidas y sí, era igual de maquiavélico.
¿Difiere
mucho el resultado final de las ideas originales?
Difiere
en los pequeños detalles. A grandes líneas siempre se sigue un guión, aunque
hay que estar abierto, ser flexible y escuchar la historia.
¿Algún
personaje favorito? ¿El menos favorito?
Anair,
sin duda, de hecho le dediqué la portada de Dueños del destino. No tengo
ninguno menos favorito, son hijos míos y podrían sentirse ofendidos.
¿En
qué te basas para hacer los personajes?
En
personas reales, en personajes de ficción, en mis propios monstruos interiores…
¿Cómo
lo haces para no perderte con tanto personaje y tantos lugares inventados?
Tengo
un fichero y un par de pizarras, además de mil notas y pos-it de colores que
suelen aparecer en los lugares más insospechados.
¿Qué
es lo que se te ha hecho más cuesta arriba al escribir los tomos de “Leyendas
de una era”?
Cada
novela ha tenido sus propios retos. Sin duda, durante la producción de La
guerra por el norte, el mayor reto supuso vencer mi propia inseguridad. La
novela me estaba gustando mucho y no sabía hasta qué punto era mi propio ego el
que me edulcoraba mi propia autocrítica. En Dueños del destino, el mayor escollo
resultó una perdida total de la perspectiva. Nunca había escrito una novela tan
extensa y, llegados a las seiscientas páginas descubrí que era incapaz de
visualizar la obra en su totalidad y no sólo fragmentos sueltos o las pequeñas
historias que la conforman. Ese fue un momento difícil que conseguí vencer.
Aprendí mucho con esa novela.
¿Sabes
hasta dónde pretendes llegar? ¿Tienes un final pensado?
Siempre
escribo con una meta, así que sí, tengo un final pensado aunque en una saga la
historia crece y cambia, poco, pero lo hace.
¿Qué
nos puedes comentar sobre la tercera entrega de tu saga?
Se
titulará Los hijos del miedo y tendrá muchas sorpresas, acción y personajes que
se asoman al abismo de sus decisiones.
¿Alguna
recomendación para los que quieren aventurarse a escribir una novela de
fantasía? Véase libros a leer, páginas web a visitar u otros consejos que te
vengan en mente.
No
hay un secreto o receta milagrosa. Leer, escribir y aprender todo lo que se
pueda de todos los que nos llevan ventaja, que son muchos.
Sabemos
que compones la música de tu novela. ¿Compones y creas mapas para luego escribir o a la inversa?
La
música la dejo para mis ratos libres. Los mapas suelen acompañar al proceso
literario, como apoyo y abono a la imaginación. Disfruto con cualquier cosa que
me suponga un esfuerzo creativo, sólo hago lo que me gusta.
Lejos
de “Leyendas de una era”, ¿algún otro proyecto en mente?
Hace
un par de semanas terminé mi próxima novela, de la que espero daros buenas
noticias pronto. Es un juego literario con el fantástico cotidiano impregnando todo. La premisa: no se
puede diferenciar lo real de lo fantástico así que muchos mundos son posibles
en este mundo imposible.
Gracias
a personas como tú, que empiezan a crear buenas obras dentro de ese género menos
valorado como la fantasía, parece que va despuntando poco a poco dicho género.
¿Qué opinas sobre el mismo dentro de España? ¿Se están haciendo poco a poco las
cosas bien?
Creo
que las cosas se estan haciendo bien pero que todavía queda mucho camino por
delante. Yo, que en el fondo soy un novatillo en esto, suelo escuchar a mi
mayores. Por ellos sé que la situación del fantástico patrio ha mejorado mucho
en los últimos diez años pero que no se ha alcanzado ninguna meta, ni mucho
menos. Hoy en día el género se ha hecho un pequeño nicho de mercado y eso es
positivo, pero cuesta mucho vencer la barrera del fandom y alcanzar un público
más generalista. Creo que la única receta al respecto es calidad y exigencia
personal.
¿Qué
piensas que hace al género fantástico distinto?
La
posibilidad de mentir a bocajarro desde el primer párrafo y que el lector vibre
con una historia ambientada en un lugar que no puede encontrar en la Wikipedia.
Es la trampa sagrada de la literatura en estado puro, la fe en la mentira.
De
todas las críticas que has recibido, con un balance general muy positivo,
¿alguna crítica que le guardes especial cariño?
Estoy
muy agradecido a todos los blogs y webs que le han dedicado unas palabras a mi
trabajo. No puedo quejarme, la verdad, pues he cosechado muchas críticas
positivas. Sin embargo, me gustó mucho el artículo que escribió Elena Monteagud
para la ScifiWorld Web, todavía me sonrojo al recordarlo.
¿Alguna
anécdota en particular en las presentaciones?
Más
que anécdota, una enseñanza: no abuses de la cerveza antes de presentar tu
novela.
¿Cuál
es la pregunta más rara que te han hecho?
Después
de media hora de perorata sobre la génesis de mi trabajo, la nueva perspectiva
en la fantasía, la creación literaria y el desarrollo de personajes en mis
novelas, cuando ya me había metido al público en el bolsillo, el escritor
Emilio Bueso me preguntó: pero, ¿de qué trata el libro?... No es la más rara
pero sí la más insidiosa.
¿Alguna
pregunta que te hubiera gustado que te hicieran?
¿Quieres
casarte conmigo?
¿Cómo
ves el panorama literario actual?
Creo
que hay una cantera excelente de autores con una calidad literaria envidiable e
inspiradora. Entre otros, atentos a Jesús Cañadas y Emilio Bueso.
Barriendo
hacia casa, ¿qué opinas sobre el boom de los blogs? ¿Crees que tienen su peso?
Me
parece genial el gran movimiento bloguero literario. Por supuesto que tienen su
peso, un peso enorme, sobretodo en lo que se refiere a ese canal tan importante
para nosotros los escritores como es el boca a boca. Las mismas editoriales han
desviado su atención a esa corriente invisible pero constante que son los blogs
literarios de cualquier género. Sin embargo, y aquí viene la parte negativa,
hay una importante endogamia entre los blogs y las redes sociales y eso crea
círculos cerrados de alabanzas que juegan en contra de los escritores y del
mismo género fantástico. Es innegable que el género fantástico en España
soporta muy poca exigencia literaria por parte de la mayoría de lectores.
Personalmente, echo de menos reseñadores más duros y objetivos. Al fin y al
cabo, todo juega a nuestro favor excepto la complacencia.
Última
pregunta, lo prometo, ¿quieres añadir algo más a la entrevista?
Le
añadiría alguna pregunta a mala fe.
Por
nuestra parte, creo que ya es hora de retirar el acoso y derribo al cual te
hemos sometido. Gracias por tu atención, espero que la gente disfrute leyendo
la entrevista tanto como nosotros al hacerla.
Muchas
gracias por vuestro interés. Nos leemos pronto.
Guillem López, entrevistado por
El Barbus.
Pedazo entrevista te has marcado. La verdad es que este autor es una persona interesante a distancias cortas. Muy buenas respuestas y sobretodo cómo te ha ido toreando Barbus a lo largo de la entrevista. Enhorabuena.
ResponderEliminarY tanto que me ha toreado jajajaja Muy bueno este hombre. Entre las entradas de su blog, lo que vi en persona en la presentación de su segunda novela y esta entrevista, puedo decir que es un espécimen a contemplar.
ResponderEliminarMe encanta este hombre jejejjeje,la entrevista es una pasada, yo me quedo con la parte en el que hace esa pequeña historieta y sobretodo con la frase " La vida entera es un truco. Unas veces somos el mago, otras el conejo blanco que sale de la chistera", me ha dado que reflexionar jejejeje.
ResponderEliminarUn beso y enhorabuena por esta entrevista, y otro beso a Guillem que tiene mucho camino con esas pedazo de novelas que escribe, a ver si por fin me leo "La Guerra Por El Norte".